Seguro que alguna vez te has preguntado por qué tu teléfono viene con tantas aplicaciones instaladas, si nunca las vas a utilizar. El bloatware lleva acompañándonos mucho tiempo, tanto en los ordenadores como en los smartphones. ¿Sabes lo que es? ¿Sabes para que lo necesitas? Porque sí, es algo necesario en muchas ocasiones.
Hoy, vamos a contarte qué es el bloatware y por qué lo necesitas -solo en algunas ocasiones-. ¿Quieres saber de qué va el asunto? Vamos allá.
Hay varios tipos de bloatware, pero, por lo general, podemos definirlo como aquellas aplicaciones preinstaladas por parte del fabricante, a las que les vas a dar poco o ningún uso. Cuando compras un terminal Sony, Samsung o LG, estos vienen cargados de aplicaciones que no podemos desinstalar, y que se quedan ocupando RAM, memoria y gastando batería.
Hace unos años, esto era sencillamente insoportable. Recuerdo el famoso LG Health, una aplicación que se quedaba contando los pasos y las calorías sin tu permiso, gastando una cantidad de batería que no estaba en los escritos. Samsung, con su famoso Touchwiz, es otro claro ejemplo de cómo llenar el móvil de aplicaciones que nunca se van a usar.
No, el bloatware no es solo un asunto de los fabricantes, sino del mismo Google. La gran G nos obliga a tener instalados todos sus servicios, Hangouts, Play Music, Play Games, Play Juegos, Duo… En la actualidad, el bloatware de Google es incluso más molesto que el de los fabricantes, ya que su suite de aplicaciones es bastante grande, y los usuarios no suelen utilizar sus servicios.
En cuanto a los fabricantes, debido a que los terminales son cada vez más potentes, introducen bloatware que llega a ser útil y funcional. Por ejemplo, si tienes un Google Pixel, tendrás que andar descargando aplicaciones de terceros si quieres un explorador de archivos decente, o cualquier aplicación más específica. En un móvil con capa de personalización, -OnePlus, sin ir más lejos-, no tendrás que andar descargando nada, ya que este tipo de apps vienen preinstaladas.
Además, por lo general, las aplicaciones de los fabricantes están más elaboradas que las de Google. Por ejemplo, la app de calendario de Samsung, la app de música de Sony o HTC, son aplicaciones que le vienen de perlas a tu smartphone.
Si siguen sin convencerte las apps del fabricante o de Google, poco puedes hacer en la mayoría de los casos. En lo que se refiere a las Google Apps, puedes irte a los ajustes e inhabilitar las aplicaciones que no quieras utilizar. Esto, reducirá su peso al máximo y hará que no se ejecuten, aunque las aplicaciones van a seguir instaladas.
En el caso de las aplicaciones de los fabricantes, últimamente están haciendo esfuerzo para que puedas desinstalar de forma nativa las aplicaciones preinstaladas. En el caso de que no puedas hacerlo, tendrás que volver a utilizar el proceso de inhabilitar, o rootear tu teléfono para acabar con ellas definitivamente.
Hace unos años el bloatware era un problema demoledor para Android, ya que el rendimiento de nuestros terminales se veía mermado de una forma espectacular. A día de hoy, si tienes un terminal medio decente no tienes por qué preocuparte de esto, ya que no vas a notar diferencias en el rendimiento ni la batería.
Sin embargo, nunca está de más revisar el listado de aplicaciones para comprobar si hay algo que podemos eliminar, para así liberar un poco de espacio y desahogar al teléfono.
